Ximi, en un estado de desorientación, se vio forzada a huir tras el deterioro de Enzo, que se encontraba al borde de la muerte. César, por su parte, como consecuencia de haber roto el acuerdo con Palacios, fue encerrado en la prisión. Polaco, entonces, intentó desesperadamente hallar una solución para el caos que se desencadenó.